Es una playa emblemática periurbana ubicada en la zona de San Román con arena fina y dorada y una longitud de 380 metros. Ofreciendo un espacio suficiente para disfrutar de la tranquilidad.
Dispone de arena en marea baja, en marea alta no tiene superficie de arena seca.
Debe su nombre al hallazgo de la talla de la Virgen entre las rocas de este lugar. Motivo por el que, junto a la playa, se encuentra una isla que alberga la ermita de la Virgen del Mar, que es patrona de la ciudad de Santander.
Su entorno es de gran belleza, ya que fusiona la arena con el entorno rocoso y verde de la isla que hacen de este lugar ideal para disfrutar de la Costa Quebrada.
El acceso es fácil ya que cuenta con una amplia zona de aparcamiento, pero también se puede llegar a ella a través del servicio de autobús municipal, que cuenta con una parada cercana.
Debido a sus aguas cristalinas, la playa de La Virgen del Mar es ideal para que los submarinistas puedan disfrutar de los bellos fondos marinos de esta zona.