#SantanderLibrealAire
Santander es una ciudad de la que disfrutar libre al aire de sus entornos naturales.
Recorriendo sus calles podemos encontrarnos con maravillosos espacios para el esparcimiento, el descanso y con vistas magníficas. Entre otras, las que puedes tener de la bahía mientras vas por el Paseo Marítimo o, de sus playas, mientras tomas un helado en El Sardinero o te diriges hacia la Península de La Magdalena por Reina Victoria.
La Península de La Magdalena es uno de los grandes entornos naturales de Santander. Se trata de uno de los espacios de mayor valor paisajístico de la ciudad. Sus acantilados, sus playas, sus campas y el pequeño parque marino que acoge en su recinto, son lugares de paseo habitual de los santanderinos y de muchos de los visitantes que se acercan hasta la capital de Cantabria.
Como lo es, por supuesto, su magnífico Palacio, un singular edificio en cuya arquitectura se entremezclan el estilo predominantemente inglés y francés con elementos típicos de la arquitectura montañesa. Sus instalaciones fueron durante 17 años residencia de verano de los Reyes y, en la actualidad, es uno de los emblemas de la ciudad y epicentro de la actividad académica, congresual y eventos.
Las instalaciones del Palacio de La Magdalena, habitualmente, reciben las visitas de locales y turistas. De hecho, es un gran reclamo y, también, testimonio de los años dorados de Santander cuando los Reyes y la corte disfrutaban de la ciudad, de sus playas y las aguas del Cantábrico en los conocidos Baños de Ola.
Otro de los grandes espacios que nos encontramos parqueando en la ciudad es el Parque Atlántico de Las Llamas. Es un gran pulmón para Santander en el que se puede disfrutar paseando, haciendo deporte, en los juegos infantiles y, por supuesto, descansando en sus bancos, en el prado, a la sombra de sus árboles o viendo el estanque y las aves desde una de sus pasarelas.
Este entorno tiene un gran valor medioambiental por su fauna y su flora. Pequeñas aves habitan este lugar que cuenta con más de 2.400 árboles. Especies arbóreas típicas de la cornisa cantábrica se entremezclan con las ribereñas del océano Atlántico dando nombre a este impresionante espacio.
En Santander nos encanta estar al aire libre y en plena naturaleza y lo hacemos recorriendo sus sendas para ver los acantilados que nos conducen hacia el Faro de Cabo Mayor a través de la ruta que parte desde Mataleñas, dirigiéndonos hasta la Virgen del Mar, todo un símbolo de la ciudad; o hasta su punto más alto en Peñacastillo.
Santanderes una ciudad para disfrutar, también, del sol y qué mejor lugar que hacerlo en sus playas. La ciudad cuenta con magníficos arenales que la recorren de punta a punta desde la Virgen del Mar hasta Los Peligros. En total 13 arenales, entre los que destacan los urbanos que cuentan con certificado ‘Q de Calidad Turística’ y ‘Safe Tourism Certified’.
Naturaleza libre al aire. Así elegimos entretenernos en Santander, ¿y tú?