Miradores e Instagramers

Paseos por Santander

Si quieres ser un auténtico instagramer, este es el paseo que tienes que realizar para enseñar a tus seguidores las maravillosas vistas de Santander desde los mejores miradores de la ciudad.

Norai

La primera fotografía tienes que hacerla desde el Puerto Pesquero Dársena de Maliaño, en este lugar suelen dejarse multitud de aparejos de pesca para que sean reparados por las rederas. Tu post mostrará la tradición marinera que caracteriza a nuestra ciudad.

Si caminamos en dirección al centro, llegaremos a la Estación Marítima, construida en 1971, se caracteriza por su tejado de líneas curvas emulando las olas del mar. Hoy en día, unas 150.000 personas al año pasan por esta estación.

Desde aquí te proponemos sacar una panorámica que mezclará la bahía de Santander con las montañas verdes de fondo. Una imagen que quedará grabada en la memoria de todo aquel que la vea.

Catedral

¿Te animarías a ver la ciudad desde las alturas? Anímate y sube a la Torre de la Catedral, otra perspectiva de la ciudad te está esperando y seguro que a tus seguidores les encantará descubrir un Santander diferente.

Cerca de allí se encuentra el Centro Botín, donde podrás caminar a través de unas pasarelas que se encuentran sobre el mar. Si te gusta la fotografía es el sitio ideal para sacar con tu cámara millones de fotos distintas desde muchos ángulos.

Al lado de la Centro Botín hay una Grúa de Piedra construida entre 1896 y 1900, sirvió para cargar y descargar mercancías de los barcos que atracaban en el muelle. Restaurada recientemente, se ha convertido en uno de los iconos de la ciudad.

Junto a ella, el Palacete del Embarcadero diseñado en 1932, su función original fue la de aduana de la ciudad, pero hoy en día se utiliza como sala de exposiciones.

Lancha

Una foto que quedaría perfecta en tu feed de instagram desde estos dos enclaves sería la de una lancha llegando a Santander, ¿No crees?

En el Río de la Pila, una de las calles de la ciudad con más ambiente nocturno, encontrarás el Funicular del Río de la Pila, no dudes en subirte y sacar una foto desde las alturas. Contemplarás todas las casas que hay en el centro de la ciudad con el mar y las montañas de fondo.

Otra parada imprescindible es el Paseo Pereda, rodeado de grandes edificios que destacan por su elegancia y su arquitectura y enamorarán al objetivo de tu cámara.

Paseo Pereda

Si seguimos caminando llegaremos a Puertochico. Este antiguo puerto pesquero concentraba la actividad marinera durante el s. XIX y principios del XX. Hoy es un lugar de gran atracción turística gracias a sus vistas y su oferta hostelera.

La foto desde este mirador se convertirá en una auténtica postal gracias a los pequeños botes en los que los aficionados a la pescan salen a navegar temprano aprovechando la calma de la bahía en contraste con los barcos de recreo más grandes, donde los santanderinos pasan la mayor parte del verano.

Si seguimos caminando llegaremos hasta Castelar, ideal para sacar una foto tomando algo en una de sus terrazas con vistas al mar.

Gamazo

Uno de los lugares preferidos por los santanderinos para pasear es la Duna de Gamazo. Estamos seguros de que conseguirás sacar una fotografía que transmita la paz que aporta este mirador.

Si continuamos paseando hacia el Sardinero a mitad de camino nos encontraremos con el Club de tiro, ideal para descansar y tomar algo en su amplia terraza.

La panorámica que no puede faltar en tu book de fotos es desde la Playa de los Peligros o desde la Casa Botín. Nosotros te proponemos acercarte a a la hora del atardecer, ya que la luz es de película. Podrás apreciar el Puntal de Somo en contraste con la bahía.

Otra parada obligatoria es el Mirador Caballerizas, con una terraza espectacular a los pies del Palacio de la Magdalena.

Faro de la cerda

Si continuamos paseando por este bello entorno, tal y como es la Península de la Magdalena, llegaremos al Faro de la Cerda, uno de los miradores más espectaculares que tenemos en Santander donde podrás contemplar los acantilados que rodean la península y la Isla de Mouro, cuyo faro fue construido en 1858 con el objetivo de avisar a los barcos su entrada en la Bahía.

El Faro de la Cerda se construyó sobre acantilados y en el mismo lugar hubo un fuerte (1639) construido para proteger la ciudad de los enemigos. Hoy, sus instalaciones se destinan al proyecto docente Aula del Mar.

Al final de la subida llegamos a la terraza norte del Palacio de la Magdalena, una amplia explanada desde la que poder contemplar la enorme arquitectura palacial de la antigua residencia de verano de los reyes Alfonso XIII y Victoria Eugenia y el mar cantábrico.

A pocos metros de allí, se encuentra la Casita del Mareógrafo, construida en 1874 para medir los vértices de la Península, respecto al nivel del medio del mar junto con el de Cádiz y el de Alicante.

Camello

La siguiente parada de nuestro paseo es la Playa del Camello, prepara tu cámara porque si hay marea baja tienes que capturar con tu objetivo la famosa roca que tiene forma de camello, de ahí el nombre de esta playa.

Si continuamos paseando, alcanzaremos la terraza de la Primera Playa, donde además de poder visualizar el mar cantábrico en todo su esplendor podrás conocer una de las playas preferidas por los santanderinos. Antiguamente acudía a ella la nobleza, y la burguesía iba a la 2ª.

Justo al lado, nos acercamos a los Jardines de Piquío, que separan la Primera y Segunda playa de El Sardinero y es el lugar ideal para pasear. Gracias a su mirador, podrás contemplar una de las mejores vistas de la ciudad.

El Sardinero

Al final del paseo, llegamos al Mirador García Lago, que ofrece una panorámica de El Sardinero.

Si volvemos sobre nuestros pasos veremos una rotonda, cruzamos la calle y subimos por unas escaleras que nos llevarán directamente a Cabo Menor. Desde aquí podrás ver claramente la cara de Corocotta, un célebre guerrero cántabro, dibujada por el perfil de los accidentes geográficos.

Continuando por la senda llegaremos a la Playa de Mataleñas, un lugar ideal en donde disfrutar de buenas vistas mientras te das un baño.

Mataleñas

En lo alto veremos el Faro de Cabo Mayor, con más de 30 metros de altura, es el faro más importante de Cantabria. Construido en 1839 en el mismo lugar donde, desde tiempos remotos, se hacían señales a los barcos con banderas por el día y con fuego por la noche.

Muy cerquita de allí hay una pequeña construcción en memoria de William Rowland, un británico que murió en este punto durante su visita a José Jackson, encargado del semáforo de señales para barcos de Cueto, el Panteón Inglés.

La Maruca

Una de las zonas con más ambiente marinero, es la Playa de la Maruca, donde podrás ver barquitas amarradas en la pequeña ría de San Pedro del Mar. Es una playa pequeña, rocosa, y junto a esta hay un sendero que conduce hasta el mar.

En San Román se encuentra el Santuario de La Virgen del Mar, patrona de Santander y de los pescadores que cada año, 51 días después del Sábado Santo, acuden en procesión hasta la ermita. Enclavado en un islote, al santuario se puede acceder a través de un puente. Un mirador sensacional desde donde disfrutar del mar desde otro ángulo.

Virgen del mar